Era 21 de Septiembre, la noche prometía. Nos dirigimos por caminos distintos a casa de Dardo, donde nos acicalaríamos. Llevábamos más de 1 mes esperando esta fecha. La habíamos marcado en tantos calendarios distintos de demasiadas formas alternativas, que sabíamos que iba a ser épico.Ya estábamos en casa de Dardo, habíamos comido y el proceso de "elegantarse" (transformarse en pura elegancia) ya había empezado. E decidió ir Classy-Casual, con vaqueros, americana y pajarita, a parte, claro esta, de un precioso ramo de flores que tenía como destinataria la madre de Samy. Por otro lado, Polaco iba con un bonito traje, unos tirantes y una agradable corbata. El resto, dijese de C, G, X, Dardo, Fatty y H, iban con unos trajes perfectamente planchado, con una elegancia sublime; una pajarita, que hacía de ellos no solo unos señoritos de buenas maneras sino clásicos, y unos tirantes que les daban un toque impresionante. Y, permitidme añadir, algunos detalles únicos de alguno: X y G llevaban unos sombreros modo "Gangster"; H y Dardo se permitieron el lujo de vestir un impoluto guante blanco; y H, a parte, llevaba un bonito pañuelo símbolo de la suprema elegancia clásica.
Salimos de casa de Dardo, y como la gente interesante, había en la puerta unos preciosos e impolutos Rolls Royce, con ocho plazas libres, cuatro en cada coche. Pero no os preocupéis, que no eran para nosotros, demasiado para gente mayor, pensamos. Giramos la esquina, y allí estaba, una recién lavada y brillante limusina blanca. Ocho plazas, un chófer, un único destino, casa Samy.
Iniciamos nuestro largo pero interesante trayecto hacia allí. Alrededor de una hora nos llevó llegar. Gritamos, grabamos, para resumir, lo pasamos "Teta". Paramos para comprar las bebidas que necesitábamos para darle un toque más interesante a la noche, y tabaco, para algunos interesados.
Llegamos a la casa, obviamente anunciando previamente nuestra llegada. E hicimos, nada más llegar, la llamada "los putos amos", que es difícil de explicar, pero interesante, pero no nos detengamos en eso. El caso es que cogimos a Samy y a la cumpleañera Sofy y les dimos una vuelta de cortesía en modo de agradecimiento.
La noche siguió su habitual ritmo. Empezando un poco tranquila, pero a medida que pasaba la noche, nos hacíamos amigos de todos, todo empezó a coger color y se transformó en la fiesta que todos esperábamos. Una fiesta cerca del tipo Project X. Había una joven, bastante atractiva por cierto, que hacía cócteles. Un DJ que hacía lo que podía con la música, y toda la juventud, como dicen los latinos, despapayando.
Al acabar la noche, una gran noche, contamos, más o menos, 4 triunfadores, "If You Know What I Mean". Un gran noche, grandes amigos, aún mejor fiesta. Una vez más, GRACIAS SAMY & SOFY¡¡






